martes, 2 de diciembre de 2008

Comentarios de quienes analizaron la obra del artista

Final de la fiesta (Tinta y barniz sobre harboard - 122cm x 122 cm- 1995)

Judith (De la serie mujeres de La Biblia - Libro objeto 2007- 50cm x 40 cm)
DONATO GRIMA
-La intemporal universalidad-
Por Antonio Urrutia(Crítico de Arte y Profesor de Historia del Arte Departamento de Estética e Historia del Arte Universidad La Sorbona - Paris- Entre otras importantes publicaciones, es autor del libro que estudia la obra de Velásquez.)
¿Y si...hubieran vuelto? ¿Y si no se hubieran ido nunca? Quiero decir aquella sartas de espantajos y fantoches que en uno de los célebres caprichos de Goya anunciaban: "Si amanece...¡nos vamos!" Es increíble como ha prolongado la noche, mucho más allá de todo lo previsible, sus fétidos hedores. Noche de tinieblas, macabro ritual viviente todavía no ido. Fantoches cada día más cerca de la nada, imbuidos todavía de su poder, se han vestido ahora de corbata y armiño, tocan el violoncelo y beben champán. Algunos,¡precaria inocencia!, rasguean aires ausentes en paródica mandolina. Donato Grima, viajero de países y profundidades, los descubrió en trasnochados salones de cortinas ennegrecidas, de muros manchados de saliva azul, de ocre saliva aguardentosa. Los descubrió sumidos en una rara conspiración de silencios y torvas miradas. Lo curioso es que, en su inmovilidad, en su tez de blanquecino pergamino, más parecían caterva de figuras para un museo de cera que seres habitados por un mínimo aliento de vida. Allá donde estaban, ni las lámparas iluminaban ya nada, ni entraba la menor brisa de aire por las ausentes ventanas. Como sorprendidos en inesperada instantánea, los gestos de los fantoches habían perdido de pronto significado y relevancia. No se sabía bien sus miradas eran miradas absortas o miradas vacías, si sus cabezas seguían o no urdiendo deleznables intrigas. Por no saber, no se sabía siquiera si alguna vez habían hecho uso de la palabra. La presidenta de gabinete, que quería darle la teta a un ridículo personajillo del mismo, no era ya ni Venus, ni ninguna de las Vírgenes nutriendo a alguno de sus santos, ni prostituta de prostíbulo. ¿Gabinte, Prostíbulo? Azarosas asociaciones. ¡Vaya usted a saber! Ya sólo esperan. Esperan que alguien los cubra con una grisácea mortaja de telarañas y los convierta en fatuas luciérnagas de estercolero. Transformado un día, definitivamente, en estatuas de sal pétrida, nosotros los abandonaremos. Porque esta vez no volveremos a caer en la trampa, no volveremos a esperar que nos anuncien " si amanece...¡ nos vamos !. Los que nos iremos, gracias a algunos Donato's Grima que corren por esos mundos, somos nosotros. Dándonos a ver lo negativo, lo indecoroso y revulsivo de nuestra época, el pintor tucumano nos está indicando, al mismo tiempo, que hay una realidad otra, nos está haciendo sentir la urgencia de la positividad, de otras ventanas abiertas, de otros aires que los pestilentes aires de cementerio. Grima está diciendo " no al equilibrio del terror" y sí a nuestra reconciliación dramática con el devenir incierto del universo, nuestra casa grande donde una mariposa es tan misteriosa como un columpio al que arrastran las galaxias con la ternura de un hombre amacando un niño,sin tocar fondo nunca, como el cielo, cayendo libremente sobre el alma." Donato Grima considera que la pintura sin pensamiento, sin contenido ético no es auténtico arte. Remedando ligeramente a Kant, quizás dijera Grima que los pensamientos sin expresión son pensamientos vacíos y que la "sensación sin concepto es ciega." Grima se pronuncia por un arte comprometido, un arte de crítica social y política. Peligrosa actitud si las hay, que tantos desastres ha provocado a lo largo de la historia de las artes y las letras. Pero ahí es, precisamente, donde Donato Grima da toda la talla del auténtico creador. En efecto, su obra podrá inspirarse en personajes o hechos concretos de la vida argentina, quizás el espectador tucumano saque referencias precisas contemplando obras como "La última cena-dora" o "Con la música a otra parte", pero lo importante, lo determinante, no reside ahí, sino en la capacidad de Grima para trascender la verdad inmediata y darle intemporal universalidad. Sus personajes pueden ubicarse en cualquier época o país, pertenecen al linaje de los signos imperecederos( ¡Díos mío, qué larga es la noche! ). Con mordacidad, con deformativo sentido del humor, con pincelada turbulenta y a la vez, estructurada composición, Grima nos hace viajar, como ya han conseguido o conseguirán otros grandes pintores, por los oscuros, vergonzantes entresijos del alma humana. Que ese lenguaje tenga que ser calificado de expresionista, me parece cuestión de poca monta. Y más aventurado me perece aún entroncar a Grima en el expresionismo germánico. Familia tan amplia, por otra parte, que en ella caben formulaciones tan dispares como pueden ser Ensor, Munch, Nolde, Permeke, Klee, Kokoshka, Shiele, Max Weber, etc. Cierto que podemos, con buena voluntad, encontrar parentesco entre algunas obras de Grima (particularmente cuando pintó en 1976 la serie "Los Idiotas", o "La muerte de un payaso" (1986), o "Noche Buena" (1989) y cuadros de Nolde como "Público de Cabaret", "Gente Alterada", "La adoración de los Reyes". Quizás Beckman estaría más cerca en "Sociedad", "Brindis por año nuevo" ? ¿ Quizás Otto Dix? Si el expresionismo es, como pretendía Selz, "la proyección visual de la experiencia emocional del pintor, y comporta la urgencia de la manifestación del sentimiento de angustia del hombre ante el mundo y la sociedad, con un sentido dramático, interjectivo, de protesta", Donato Grima es y no es expresionista. Si el expresionismo consiste en la acuñación de imágenes distorsionadas, violentas, llenas de pesimismo, Donato Grima es y no es expresionista. Y si los números no nos cuadran exactamente es por que hay una diferencia fundamental entre el expresionismo germánico o nórdico, en el que se trata sobre todo, de traducir con indecible fuerza el tormento de seres desgarrados en los más profundo de su tejido anímico. Grima, por el contrario, no se propone expresar sentimientos individuales, conflictos del ser consigo mismo, sino de ver, en su conjunto, con cierta irrisión, sin deformaciones excesivas, la vacuidad y el peligro del poder, la temible red de la insanidad en que nos vemos poco a poco atrapados. Donato Grima no es un pintor expresionista, ni surrealista, ni propiamente simbolista. Es, en cualquier caso, todo eso a la vez, totalmente asumido desde las coordenadas intransferibles de una acentuada personalidad. Lo que sí está clarísimo es que, como hiciera Goya, también Donato Grima nos grita:¡ Todavía no se han ido !
DONATO GRIMA: LA METAFORA DE LA LINEA(Texto Catálogo Exposición Centro Cultural Borges- Buenos Aires- Mayo 1998)Por: Cristina Bulacio* *Doctora en Filosofía, Universidad Nacional de TucumánLibros publicados: Los escándalos de la Razón en Jorge Luis Borges, Ed. Victoria Ocampo, Bs. As. (2003)y coautora junto a Donato Grima del libro: Dos Miradas sobre Borges, Ed. Gaglianone, Bs. As. (1998) entre otros
Todo artista tiene en sí la potencia de crear nuevos mundos. El arte es ficción de algo ficcional que es la realidad, y esto se advierte detrás de cada obra de Donato Grima. Son mundos que alimentan el universo de nuevas significaciones en las que reposan los dos principales elementos de una obra plástica: Imagen y concepto. La verdad de esos universos no se le ofrece al espectador como algo definitivo, sino como una experiencia inconclusa abierta, con formulaciones históricas y temporales que se configuran en una interpretación. En este caso, la obra de Grima nos instala en un mundo complejo, racional y sanguíneo al mismo tiempo, con una marcada atmósfera borgena. Sostiene el crítico de arte Antonio Manuel Campoy, en el prólogo de un libro sobre este plástico "...Comentando alguna vez con Cansinos Asséns la originalidad de Borges, llegamos a la conclusión de que el gran escritor argentino era, en síntesis, un poeta surrealista ... Pues Donato Grima pertenece también a esta extraña raza de poetas que alteran las visiones acostumbradas" (Donato Grima, Galería Infantas, Madrid; 1991, pag. 7). No hay obras perdurables que sean ligeras o superficiales. Una creación artística debe abrir un mundo nuevo de sentidos, de libertad de verdades. Crear es ese impulso a construir un mundo no como una mera acumulación de hechos, sino como los múltiples sentidos que aletean alrededor de lo creado. Esto es lo que se experimenta ante las formas plásticas de Donato Grima. El andamiaje cultural no soporta el peso de los significados que trascienden lo cotidiano, o mejor decir, que se encuentran sutilmente velados en lo cotidiano mismo. Cuando el lenguaje plástico esconde la abigarrada multiplicidad de los sentidos detrás de las formas, el goce estético es insoportable, no complaciente, no explicable a nivel puramente racional. Se trata, entonces no de desentrañarlos, sino mas bien, de experimentarlos en su dimensión puramente estética y esa dimensión no habita en las causalidades cotidianas. Las líneas que envuelven los dibujos de Grima nos abren significados no convencionales, sugieren ruptura con el tema mismo que se ofrece con apariencia de simplicidad. Estas líneas, al igual que el planteo del espacio ambiguo, cumplen al menos dos funciones, demarcan nítidamente el universo del que se habla, y, al mismo tiempo, conectan lo espacial directamente con la imagen enriqueciendo lo plástico. Esta manera de tratar la imagen, despiertan resonancias de los laberintos borgeanos en cuanto no tienen un recorrido neto ni un final claro, y sus apenas insinuadas curvaturas, anuncian la presencia de posibles laberintos. La metáfora de la línea es en Grima un modo de aludir a un orden laberíntico de la realidad que él experimenta como inevitable, abismático y fascinante. El planteo expresivo que Grima otorga a los márgenes de cada obra, insinúa como lo haría Derrida, que en él se teje la urdiembre de muchas otras creaciones culturales que constituyen el horizonte de inteligibilidad que hace posible no sólo la existencia de esta obra concreta, sino también el despliegue de toda su fuerza significativa. Podemos decir que la obra de Donato Grima en la que se destaca la potencia de la imagen, el dominio de las formas y su fuerza simbólica, encierra una trasgresión a la mirada convencional, es la síntesis de una experiencia a fondo de la existencia, enriqueciendo el universo estético, siempre que consideremos a éste como el ámbito del goce.
LA EXPOSICIÓN "GRIMA" EN NUEVA YORKPor Antonio Morales*(Nueva York, enero de 1994)*Crítico de arte, editor de las revistas españolas”Correo del Arte” y “Correo del Arte Hispano”
Conocí a Donato Grima en Madrid, en 1991; lo conocí de la mejor manera: fue a través de su obro en una exposición que aún se recuerda en Madrid; (cuando digo Madrid, digo España país que dio grandes artistas. En este frío invierno de New York (siempre pensé que el infierno estaba representado por el calor) encuentro la obra de Donato Grima, distinta, tremenda, nada que ver con lo que se hace por estas latitudes. Pero algo no cambio en Grima: su agudo sentido de lo irónico, su forma del ver el mundo que naufraga en lo irónico. Hay dos categorías de artistas: los que a pesar de las modas no transan con las corrientes estéticas y asumen su arte como una actitud de vida; y los “etcéteras” que, alejándose de su identidad, favorecen el proceso de colonialización cultural, y refuerzan con su”mal hacer”, teorías importadas que desvían la atención de las nuevas generaciones, alejándolas de la realidad y de sus posibilidades de búsquedas concretas; me refiero puntualmente a las envejecidas vanguardias. La falta de referencias teóricas precisas es lo que ha permitido en nuestra época una crítica de arte sin brújula, voluntariosa y en ocasiones ignorante. Ha oscilado entre la imposición de criterios, en general extraídos de consideraciones por lo general ajenas al arte, y la reinterpretación literaria del fenómeno artístico. Esta crítica creadora ha sólido representar una inútil duplicación o, a lo sumo, la traducción de la obra de arte a otra obra de arte, que por lo común, siempre fue inferior a la primera. En nuestra época, la crítica, obviamente, ha tenido mayores deficiencias, y carga sobre su conciencia grandes equivocaciones: el haber fomentado las vanguardias". El arte es el medio que el artista emplea para urgar el perfil de la realidad, para liarse a sí mismo o, para cuestionar el mundo que lo rodea. Donato Grima, dibujante exquisito, pintor temperamental, dueño de un gran oficio, y sobre todo, de lúcidos conceptos. Pese a constituir estos factores motivos plausibles que explican la trascendencia de la obra de Grima, hay otros elementos humanos; lo visionario, lo ético, lo político universal. Como todos los grandes artistas que dejaron huellas, Grima entiende que el arte cumple una función orgánica, útil y necesaria. “No se puede pasar por la vida como una maleta de viaje”. No se puede entender el arte como un mero hecho estético: hay algo más, debe haber algo más, y esto es responsabilidad de cada uno. La capital del mundo" como se suele llamar a Nueva York, recibió la obra de Donato Grima, más precisamente, Cadena Studio, una de las tantas galerías de arte que se encuentran en esta zona del Soho", lugar donde se mezclan casi todas las culturas universales (y esto es la maravilla de esta impiadosa ciudad de grandes contrastes) donde llegan artistas de todo el mundo; "donde se ve de todo". Nueva York es la ciudad de los más": más italianos que en Roma, más judíos que en Israel, y, por supuesto, más artistas que en todo el mundo. La posibilidad de exponer en Nueva York es difícil, y más difícil poder destacarse entre tantos miles de artistas que deambulan por las galerías enfrentándose a una realidad que no les pertenece. Pero, cuando se tiene una obra honesta, seria, hecha con el rigor y el respeto que merece una obra de arte, ello salta a la vista, “¡Convencedme!" He aquí el único titulo de competencia que exijo al artista. He aquí el límite que separa al artista de oficio del artista de vocación, decía Wílhem Worringer. A Donato Grima en España se lo comparó con Goya por la manera de pintar los vicios del poder; otros lo comparan con los grandes del expresionismo alemán. Lo cierto es que en arte como en biología, hay herencia, pero también identidad. Con la obra de Grima en Nueva York, el arte hispanoamericano entra al concierto mundial en condiciones de igualdad y no como émulo, como eco de otras historias. No existe una forma para ser internacional, el único camino del arte es la autenticidad, el trabajo disciplinado e independiente y la exploración de si mismo. El arte internacional lo hacen los artistas que, a fuerza de ser individua les, han trascendido con una obra coherente, sin concesiones, a través del hilo conductor entre el ser y el arte, entre el e1 espíritu y la materia, que plasman aquel misterio del goce cuya intimidad y secreto hacen que una obra sea eterna o fugaz. Quizás en la consecución por parte de Grima de este nivel de dominio expresivo, pueda hallarse la explicación que suscita el hecho de estar entre los escasos artistas que lograron romper en este invierno, el hielo de Nueva York.

El dia que Dyonisos descubre que la musica es un arte abstracto

El dia que Dyonisos descubre que la musica es un arte abstracto
D.Grima 2008

Sintesis curricular del artista

DONATO GRIMA / SINTESIS BIOGRAFICA
Donato Grima, pintor, dibujante y diseñador nace el 22 de julio de 1949 en la ciudad de San Miguel de Tucumán, Argentina. Estudió Artes y Diseño. En 1975 se radica en Caracas, Venezuela. Trabajó como ilustrador para distintas editoriales y empresas de comunicacion visual. En 1984 retorna a Argentina, y en 1990 se radica de manera intermitente en España hasta el año 2001. Realizó viajes por razones profesionales y de estudio por distintos países europeos; España, Alemania, Italia, Marruecos, Nueva York, y América Latina. En 1993 funda el Centro de Arte & Diseño,(CAD) institución dedicada a la enseñanza de arte y diseño.
LIBROS PUBLICADOS1991: Donato Grima / obra plástica Ediciones Infantas-Madrid. (1998)"Dos Miradas Borges"/Cristina Bulacio, Donato Grima-Ediciones Gaglianone, Buenos Aires. (2002)"Silbando Cielos"Roberto Espinosa-Donato Grima, ediciones digitales
PREMIOS OBTENIDOS / RESUMEN
1988 -Premio Municipalidad de Santa Fé, Salón Nacional de Santa Fé, Argentina1988-Primer Premio Salón Regional del Poema Ilustrado, (poema de José Augusto Moreno) Museo de Bellas Artes de Tucumán, Argentina. 1987 - Premio Mención de Honor Salón Nacional de Dibujo -Museo de Bellas Artes- Tucumán. 1986 Primer Premio 50 Salón Nacional de Rosario, Argentina. 1972- Primer Premio Salón Regional del Poema Ilustrado (poema de Alberto Rojas Paz)1972- Segundo Premio Salón San PabloMuseo de Bellas Artes de Tucumán, Argentina.
EXPOSICIONES INDIVIDUALES / RESUMEN
2004- Centro Cultural Universidad Nacional de Tucumán, Argentina.-2001-Centro Cultural Universidad Nacional de Tucumán, Argentina.1998- Galería Infantas, Madrid, España.1998-Centro Cultural Borges., Buenos Aires, Argentina.1997- Centro Cultural Universidad Nacional de Tucumán, Argentina.-1997-Carib Art Gallery, Nueva York.1995- Centro Cultural Universidad Nacional de Tucumán, Argentina.-1994- Cadena Studio, Nueva York.-1994- Carib Art Gallery, Nueva York -1994- Casino de Costa Blanca, España.1992- Centro Cultural Universidad Nacional de Tucumán, Argentina.-1991- Galería Infantas, Madrid, España.1991- Galería Geshe Mundt, Hamburgo, Alemania.1990- Galería Gloria Aleman, Salta, Argentina.1989- Galería Alto Nivel, Buenos Aires, Argentina.1988- Museo Octavio de la Colina, La Rioja, Argentina.-1981- Museo de Arte Moderno, Mendoza, Argentina.-1980-Secretaría de Estado de Turismo, Tucumán, Argentina.1978- Galería Imaginaria, Bogotá, Colombia.1977-Galería Ocre, Caracas, Venezuela.1976-Galería Ocre, Caracas, Venezuela.1972- Sala Austral, Tucumán, Argentina.1972- Casa D’italia, Paraná, Argentina.1971- Galería "Z", Tucumán, Argentina
MUSEOS Y COLECCIONES
Museo del Barrio, Nueva York, EEUUMuseo Castagnino, Rosario, ArgentinaMuseo Rosa Galisteo de Rodriguez, Santa Fé, ArgentinaMuseo de Bellas Artes, Tucumán, ArgentinaMuseo de Bellas Artes, Salta, ArgentinaColección Robert Bosh, Madrid, EspañaColección Benito Moreno Rojo, Madrid, EspañaColección Rudiger Wolf, Hamburg, Alemaniaentre otras colecciones de Venezuela,Colombia, Brasil e Italia entre otras.